Son dos términos que se confunden bastante, sobre todo en inglés, donde la denominación tiene su historia y su miga. Me pasó el otro día comentando un post de ALT1040: tuve la impresión de que la gente confunde fácilmente software libre y software gratuito. Y efectivamente, se ha convertido en una certeza. Sobre todo tras leer un artículo de eDans donde recoge que ni siquiera Bill Gates se aclara muy bien con los conceptos.
Y es que en inglés los términos son algo controvertidos, mas en castellano no sé por qué todavía existen dudas al respecto. En el idioma de Shakespeare, en un primer momento se denominó free software al software libre, esto es, software cuyo código se distribuye libremente para que cualquiera pueda analizar su funcionamiento, modificarlo e incluso distribuir estas modificaciones. El término free puede significar libre y gratuito, de ahí que en 1998 se acuñara el término open source para denominar al software libre y distinguirlo claramente del software gratuito. Sin embargo, la Free Software Foundation, autora del primer vocablo, sigue registrando su definición como software libre. Para identificar el software gratuito existe otra denominación: las licencias freeware.
Pero bueno, dejando a un lado el cacao mental de términos anglosajones, me sorprende que se confundan los conceptos y más aún en castellano, donde tal disyuntiva no existe. Sirva este texto como nota aclaratoria entonces.
- Se denomina software libre o de código abierto (disponemos de su código fuente) al software que puede ser usado, copiado, estudiado, modificado y redistribuido libremente.
- Se denomina software gratuito a aquel que podemos acceder gratuitamente, sin previo pago.
Naturalmente, como se desprende de las definiciones anteriores, libre no implica gratuito y viceversa. Por ello, existe software libre gratuito (p. ej. distribuciones Linux gratuitas como Fedora, Ubuntu, etc.), existe software libre de pago (p. ej. distribuciones Linux como Red Hat o SuSe), existe software no libre gratuito (p. ej. el popular cliente de mensajería de Microsoft), y por último existe software no libre de pago (p. ej. Windows).