Solución del acertijo

Y por fin el momento que todos esperabais. La espera fue larga, pero mereció la pena. Publico la solución al acertijo del tipo triste y solitario que quería medir un río. Una de las muchas posibles, como han demostrado los muchos comentarios publicados en el post anterior. Alguno incluso pretendía liarse a patadas con los paisanos del cuento. Si bien no tan creativa, pero sí más pacífica, esta es la solución que dan por válida en Futility Closet.

Para averiguar la distancia entre A y B (puntos a sendos lados del río), basta con caminar desde A en paralelo a la orilla una distancia determinada y tomar una nueva referencia (C). Desde allí avanzaremos en perpendicular a la orilla, para indicar un nuevo punto (D). La última referencia necesaria, (E) es el punto donde la recta imaginaria que une los puntos B y D, corta a la orilla más cercana (recta AC).

Como observaréis por el dibujo, los triángulos ABE y CDE son semejantes, por lo que se cumple que los lados CD y CE, y AB y AE son proporcionales. O, como proponía Eugenio: puesto que el ángulo del vértice E es el mismo para ambos triángulos, podemos tomar la tangente y afirmar que CD entre CE es igual a AB entre AE.

¿Qué anchura tiene el río?

Dando brincos cual gacela entre las nuevas adquisiciones que he hecho gracias al día del blog 2008 (muchos links muy interesantes, en muchos interesantes blogs que ya conocía), me he encontrado con el siguiente problema lógico. La solución ya ha sido publicada en ese blog, pero os recomiendo que os dediquéis a pensarlo por lo menos un par de días antes de que, también aquí, sea desvelada. Dicho esto, allá va.

Va un tipo triste y solitario por el bosque, cuando de repente se encuentra un río. Como además de triste y solitario, es listo e inquisitivo, le da por averiguar qué distancia hay entre sus dos orillas.

Teniendo en cuenta que no quiere mojarse ni cuenta con medio alguno para atravesar el río, ¿cómo puede averiguar la distancia entre los puntos A y B?

La respuesta se publicará mañana.

Documentales de Richard Dawkins

Aprovechando que el famoso biólogo y divulgador Richard Dawkins está en boca de todo el mundo últimamente, os traigo unos enlaces muy interesantes a unos documentales suyos que de un tiempo a esta parte viene recogiendo en su blog nuestro compañero Irreductible.

Todos ellos están subtitulados, algunos de forma más cutre que otros… pero bueno, se siguen bien. Altamente recomendables.

Y ya de paso comentar que me hace mucha gracia las presentaciones que suelen hacer de este señor. Hace unos días, un conocido me comentaba que la primera vez que lo vio por televisión en un programa de debate, le pareció muy curioso también por esta misma razón. Ya sabéis que cuando aparece alguien en televisión suelen colocarle el típico rótulo debajo que reza: «Fulanito de Tal, matemático»; o «Menganito de Tal, actor». Pues bien, cuando salió Richard Dawkins, según me contaba esta persona, ponía: «Richard Dawkins, ateo». ¡Toma ya! Toda su vida partiéndose los cuernos estudiando, enseñando, publicando y divulgando, para esto.

Lo mismo pude leer el otro día en ALT1040, en un artículo que reseñaba una de las muchas cartas «amistosas» que recibe Dawkins de parte de religiosos fanáticos. Sí, esos mismos que proclaman el amor por el prójimo, le escriben cartas deseándole que sufra en el infierno durante toda la eternidad (eso lo más cariñoso que le dicen). Lo que quería decir, que me desvío, es que en este artículo hacen lo mismo: «Richard Dawkins es un famoso ateo, escritor, etólogo y teórico evolutivo». Por lo menos, los chicos de ALT1040 ponen su profesión, pero en primer lugar «ateo», que no falte.

No sé vosotros, pero a mí, personalmente, si después de pegarme todos los años que me estoy pegando estudiando Telecomunicaciones y la carrera de clarinete me conocieran únicamente como «ateo», me tocaría un poco los…